27 sept 2012

Sobre la enseñanza de las matemáticas

Este ensayo fue redactado con el fin de salir publicado en la revista de la preparatoria Ricardo Flores Magón "Oficial B", Ágora. Cumplí mi cometido y fue aceptado, sin embargo, rechazé la invitación a formar parte de ella debido a la poca seriedad de los jueces en cuanto a su selección. Las razones las guardaré, pero cabe decir que no me arrepiento de mi decisión y que me siento bien conmigo mismo de que hice lo correcto. Espero disfrute de mi artículo de opinión, usted será mi verdadero juez.

Nunca deja de sorprenderme la inmensa cantidad de veces que presencio o escucho esto en mi vida cotidiana: ¿Cuándo voy a usar esto en la ‘vida real’? ¿Esto para qué me sirve? No sirvo para las matemáticas. Grupos de Facebook diciendo: “Por un mundo sin matemáticas.” ¿Por qué quieres estudiar matemáticas si te vas a morir de hambre? ¿Por qué llevo matemáticas si me voy a Humanidades o simplemente no las voy a usar? Etcétera.
             
El paradigma actual de la sociedad tergiversa nuestras ideas y nos hace creer que las matemáticas son una especie de voodoo que sólo la gente ‘privilegiada’ o ‘rara’ (depende del punto de vista) comprende y que es normal presumirle a los amigos lo inepto que se es para esta ciencia, como si se estuviese en una carrera para ver quién puede llegar a un nivel más bajo de intelecto. Si bien unos son más aptos para las matemáticas que otros, todos son capaces de comprenderlas al menos a un nivel básico. Al escuchar “no sé cómo hacer este problema” en la escuela, yo sólo comprendo “no quise leer este capítulo que dice exactamente cómo resolver problemas de esta índole.”
            
 Es común leer en los periódicos, cada vez que se aplican pruebas como Enlace, titulares como “Enseñanza matemática en nivel deficiente” que provocan una alarma para las autoridades educativas y para la sociedad, pero que se disipa a una velocidad increíble como para haber hecho algo al respecto sólo para entonces volver a nacer al año siguiente con los mismos tristes titulares, como un uróboro de ignorancia.
            
 Uno creería que las matemáticas son siempre un tema aburrido para un número considerable de estudiantes, pero la verdad es que no. Las personas siempre están dispuestas a aprender matemáticas siempre y cuando no se le etiquete con este nombre, ¿o qué no las apuestas, los crucigramas, los juegos y chistes de palabras, el cubo de Rubik, los sudokus, los rompecabezas, las paradojas, adivinanzas, acertijos y los juegos de tablero como el ajedrez o el go  son algo que muchas personas disfrutan? Sentimos una atracción innata por la estructura y simetría matemática, sólo que no nos damos cuenta de ello y volvemos al mismo abismo mental. Entonces, ¿qué hace falta para que la enseñanza de las matemáticas no sea vistas como un tabú educativo?
           
 La actual enseñanza está enfocada en hacer creer al estudiantado que las matemáticas se reducen a una cuestión única de cálculo, y creer esto es como creer que escribir una novela es lo mismo que mecanografiarla. Dentro de esta ciencia hay un sin fin de temas que no son explotados y que harían, entre muchos otros beneficios, una sociedad más crítica; entre estos temas están la teoría de números, la topología, los tipos de infinito, geometría no-euclidiana, las demostraciones y el razonamiento matemático, la historia misma de las matemáticas. El estudiante usa la fórmula del teorema de Pitágoras y cree que eso es matemáticas, cuando en realidad se está perdiendo la demostración del mismo y deja de investigar en temas relacionados con eso. ¿Cómo afectaría a las clases si se le enseñase también, por ejemplo, que puede haber triángulos con tres ángulos rectos? Esto despertaría e incentivaría el sentido crítico de las personas. Sería maravilloso poder usar al máximo nuestras mentes y divagar sobre estos temas para después, con el mismo rigor mental, discutir los temas que envuelven la vida cotidiana, como lo son la política, la cultura, los descubrimientos y las corrientes del pensamiento.
           
 Hoy es urgente un cambio en el pensamiento de las personas; las matemáticas viven en un período de estancamiento en el cual cada vez menos personas quieren estudiar esta área o los diversos campos que requieren su aplicación. Y no sólo hay una crisis en el área pura de las mismas, sino en todos lados hay un coste para la sociedad el hecho de la ignorancia matemática; desde empleados de tiendas de ropa que no saben calcular adecuadamente un IVA o un descuento hasta burócratas y especialistas que por un error, pueden colapsar el sistema económico de su país o incluso del mundo, como sucedió con la teoría de David Li.
             
Como dato curioso, se ha demostrado que para que un sudoku tenga una solución única, se necesita de al menos 17 números dados desde el inicio. Pueden usar este dato para conquistar a aquellas mujeres que gusten de sudokus y datos curiosos.

Como conclusión, debemos de dejar de contar el chiste de Pita y Repita, que dice: —Pita y Repita van caminando por la calle y Pita se cae, ¿quién queda? —Repita. —Pita y Repita van caminando por la calle y Pita se cae, ¿quién queda? —Repita. —Pita y Repita van… Es hora de un cambio y de una discusión acerca de cómo la enseñanza matemática puede embellecerse, lo cual es trabajo de estudiantes, profesores y dirigentes.
           
 Incluso si a uno no le gustan las matemáticas, se debe de hacer un esfuerzo por mejorar como persona. A muchos tampoco les gusta trabajar, sin embargo, no tendríamos libros, música, vivienda, cine, entretenimiento, tecnología, ciencia, arte, comunicación y educación, entre muchas otras cosas, si la gente no hiciera sacrificios por mejorar. Las matemáticas son un elevador en la superación personal y aquellos que se rehúsen a tomarlo, están condenados a una vida de escaleras.
         
   Ahora bien, todo artículo sobre matemáticas no está lleno sin algo que desafíe intelectualmente al lector, por lo que compartiré el siguiente desafío: Poseo un tablero normal de ajedrez de 8x8, con la única diferencia de que su extremo superior izquierdo y su extremo inferior derecho están cortados, por lo que el tablero tiene 62 cuadritos. Poseo también 31 piezas de dominó, las cuales cada ficha llena exactamente dos cuadritos del tablero de ajedrez. A aquel que sea capaz de darme una combinación con la cual esas 31 piezas de dominó puedan llenar el tablero de ajedrez en su totalidad, ya sea estudiante, profesor o un lector al cual llegó a sus manos este escrito, prometo darle, sin reproche alguno, una suma de dinero suficiente para cenar en un restaurante lujoso para toda su familia y amigos. Adelante, nunca hay que parar de pensar y razonar.


Bibliografía

  1. Alsina, C. (2008). El club de la hipotenusa. Barcelona: Ariel.
  2. Evans, R., & Cooper, S. (26 de Agosto de 2011). Cracked. Recuperado el 16 de Septiembre de 2012, de http://www.cracked.com/article_19357_6-people-who-single-handedly-screwed-entire-economies.html
  3. Maddox. (1 de Marzo de 2012). The best page in the Universe. Recuperado el 16 de Septiembre de 2012, de http://thebestpageintheuniverse.net/c.cgi?u=math
  4. Paulos, J. A. (1996). Un matemático lee el perdiódico. Barcelona: Tusquets Editores.
  5. Singh, S. (1998). Fermat's Enigma. New York: Anchor Books.